Para aportar el toque de color primaveral, os proponemos recorrer este hogar de estilo bohemio y chic al que no le falta color, frescura y alegría.
En realidad no se trata de una decoración demasiado distinta a otros estilos decorativos de hoy en día, pues entre muchos de ellos solamente encontramos algunas ligeras diferencias: solo para empezar, los muebles más comúnmente utilizados para el estilo boho chic son aquellos de tipo vintage, estructuras de corte clásico con toques que denotan aires de antigüedad (como los decapados) con otros bastante más modernos. Los muebles de forja también podrían tener cabida en este tipo de decoración.
Otros elementos clave son los artículos reciclados a los que se otorgan nuevas funciones (marcos sin fotografías ni pinturas, regaderas convertidas en floreros, etc.), los artículos de cerámica, las flores naturales, artificiales o en estampados, las baratijas de los mercadillos de segunda mano, algunos cuadros con paisajes o fotografías antiguas y hasta una antigua vitrina conteniendo algunos de los anteriores ayudarán a marcar la diferencia en tu interiorismo.
No obstante, hay un solo punto en el que no puedes fallar: la elección del color. La decoración de estos espacios se caracteriza por el fomento de la luz y la naturalidad, por lo que los tonos que probablemente más abundarán en ella son los blancos (especialmente para grandes superficies), el azul celeste, los marrones y tostados más suaves y algunos tonos de la gama del verde y el beige.