Olvídate de los taburetes y las sillas de comedor, ahora la moda es llevar el salón a la cocina. Y es que desde el furor de los espacios abiertos, no hay nada más elegante que colocar un sofá en el mismo sitio donde preparas tus platos. O tal vez solo sea una excusa para relajarte… De cualquier forma, es una idea estupenda para crear un entorno cómodo en un lugar donde pasas tanto tiempo.
La cocina se ha siempre ha sido un lugar para hacer mucho más que cocinar y preparar comidas, se trata de un espacio para que los amigos y la familia se reúnan, cocinen y se relajen juntos.
Es verdad que la cocina es un lugar que se ensucia con facilidad y por tanto las manchas son una cuestión a tener en cuenta. Por ello, se recomienda optar por muebles con cojines reversibles o fundas extraíbles, e informarse sobre protectores y sprays a la hora de comprar sillas y sofás.
Es importante evitar la tapicería ligera o el terciopelo delicado, ya que se pueden manchar con más facilidad. Si te decantas por el tapizado, elige una tela oscura o veteada que sea más sencilla de limpiar. Aunque lo ideal sería optar por cuero de anilina, ya que este material desarrolla una pátina a medida que envejece, y con un poco de protección, cualquier mancha o arañazo se absorberá con el tiempo y terminará viéndose mejor